Un nuevo estudio realizado en Francia afirma que las mujeres con una deficiencia grave de vitamina D tienen más probabilidades de tener hipotensión ortostática que las mujeres con unos niveles más altos.
El estudio observacional analizó las concentraciones de vitamina D en sangre de 329 mujeres de 80 años de edad o más y documentó los casos de hipotensión ortostática (1). Los resultados del estudio mostraron que cerca del 24 % de las mujeres presentaba una deficiencia grave de vitamina D (niveles por debajo de los
10 ng/ml). Dichas mujeres tenían más probabilidades de sufrir hipotensión ortostática que las mujeres con unos niveles de vitamina D mayores. Por cada 10 ng/ml de aumento en la vitamina D se dieron 0,7 mmHg menos de descenso de la presión arterial diastólica.
Los investigadores comentaron que el aumento del riesgo de caídas en individuos con deficiencia de vitamina D observado en estudios anteriores también podría deberse a la hipotensión ortostática y a la pérdida de respuesta de adaptación de la presión arterial debido a cambios de posición como levantarse. La vitamina D es importante para la hipotensión ortostática ya que se cree que desempeña un papel en el sistema cardio- vascular (2). Se ha observado que esta vitamina contribuye a controlar la presión arterial alta y reduce el endurecimiento arterial.
La hipotensión ortostática consiste en un descenso rápido de la presión sanguínea que se da al levantarse. Se produce debido a la acumulación de sangre en las partes bajas del cuerpo al ponerse de pie. Es más común en los ancianos de mayor edad (definidos como los ancianos de 80 años o más) con una prevalencia del 30 % en dicho grupo de edad en comparación con el menos de 5 % de los individuos menores de 65 añ- os. Los síntomas incluyen mareo, aturdimiento o incluso desmayo.