OPINIÓN EXPERTA
Quince años de fortificación con ácido fólico
1 marzo 2012
Sarah Zimmerman, Iniciativa para el Enriquecimiento de la Harina, Atlanta, Georgia, EE. UU.
24 septiembre 2009
Las recomendaciones actuales para el consumo de vitamina K no se cumplen, lo que aumenta el riesgo de cáncer y cardiopatías, según afirma un nuevo análisis.
Este nuevo análisis de datos procedentes de cientos de artículos publicados que se remontan a los años 1970 también sugiere que las recomendaciones actuales para la vitamina K deben ser más altas si se desea alcanzar una salud óptima (1). Estas recomendaciones están basadas en niveles que aseguran una buena coagulación de la sangre, pero si no se logra garantizar unos niveles óptimos de esta vitamina a largo plazo puede producirse más rápidamente fragilidad de los huesos, calcificación arterial y renal, enfermedades cardiovasculares y, posiblemente, cáncer.
Los investigadores utilizaron ratones con versiones inactivas de 16 proteínas conocidas dependientes de la vitamina K. Descubrieron que cinco de estas proteínas necesarias para la coagulación tenían funciones críticas, lo que significaba que las formas inactivas eran letales. Por otra parte, otras cinco proteínas no eran tan críticas, y los animales sobrevivieron durante el destete. No obstante, la pérdida genética de estas proteínas no tan críticas dependientes de la vitamina K, una ingesta insuficiente de vitamina K1 a partir de los alimentos, la deficiencia de vitamina K y las mutaciones humanas se asociaron a problemas relacionados con la edad, incluyendo unos huesos más frágiles y el endurecimiento de las arterias, los cuales aumentaban el riesgo de enfermedades cardiovasculares. Asimismo se observó una mayor incidencia de cáncer espontáneo.
Los expertos señalaron que es probable que una gran parte de la población y de los pacientes que toman anticoagulantes (warfarina/coumadin) no reciba suficiente vitamina K para un funcionamiento óptimo de las proteínas dependientes e importantes para mantener la salud a largo plazo. Estos hallazgos proporcionan una estrategia de investigación para descubrir prematuramente biomarcadores de enfermedades crónicas y tienen implicaciones importantes para determinar la ingesta óptima de todas las vitaminas y minerales, así como en el terreno de la medicina preventiva.
1 marzo 2012
Sarah Zimmerman, Iniciativa para el Enriquecimiento de la Harina, Atlanta, Georgia, EE. UU.
22 enero 2010
Unos niveles elevados de vitamina D puedes reducir aproximadamente un 40% el riesgo de cáncer colorrectal, según un estudio.
19 agosto 2013
Según un nuevo estudio realizado en Estados Unidos, el aumento de la ingesta de licopeno, principalmente a partir de productos derivados del tomate, parece reducir significativamente el riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares.