MINERALES // CALCIO

Deficiencia

Causas

Un nivel bajo de calcio en la sangre implica normalmente una función anormal de las glándulas que producen la hormona paratiroidea (ver Funciones para la salud) responsable de regular los niveles de calcio. La deficiencia de calcio rara vez se produce por un bajo consumo de calcio en la dieta, ya que el esqueleto (huesos) proporciona una gran reserva de calcio para mantener niveles normales en sangre.

Otras causas que incluyen insuficiencia renal crónica, deficiencia de vitamina D y niveles bajos de magnesio ocurren principalmente en casos de alcoholismo severo.

Además, una alta ingesta de sodio deriva en un aumento de la pérdida de calcio en la orina, posiblemente debido a la competencia entre el sodio y el calcio para su reabsorción en el riñón. Teniendo en cuenta que las pérdidas en la orina representan aproximadamente la mitad de la diferencia de la retención de calcio, el sodio en la dieta tiene un gran potencial de afectar la pérdida ósea. En mujeres adultas, se prevé que cada gramo extra de sodio consumido al día produce un índice de pérdida ósea adicional de un 1% al año, si todo el calcio que se pierde procede del esqueleto (48, 49).

Conforme aumenta la ingesta de proteínas alimentarias, también aumenta la excreción de calcio en la orina. Una ingesta elevada de proteínas se ha asociado a una mala recuperación de las fracturas osteoporóticas y mayor riesgo de fractura de cadera (2).

El fósforo, que suele estar presente en alimentos ricos en proteínas, tiende a disminuir la excreción de calcio en la orina. Al mismo tiempo, el fósforo tiende a aumentar el contenido de calcio de las secreciones digestivas, derivando en una mayor pérdida de calcio en las heces (1). El efecto de una ingesta elevada de fósforo sobre el equilibrio del calcio y la salud ósea aún no está claro.

La cafeína en grandes cantidades puede aumentar el contenido de calcio en la orina durante un breve periodo de tiempo. Sin embargo, en dos estudios no se halló relación entre la ingesta de cafeína y la pérdida ósea en mujeres posmenopáusicas (50, 51). Un estudio observacional reveló una aceleración de la pérdida ósea en mujeres posmenopáusicas que consumían menos de 744 mg de calcio/día y bebían de 2 a 3 tazas de café/día (52).

Síntomas

Una ingesta baja de calcio durante un periodo prolongado (‘crónica’) en personas en desarrollo puede evitar que se alcance una cantidad máxima de masa ósea óptima. Una vez logrado el pico máximo de masa ósea, una ingesta inadecuada de calcio puede contribuir a acelerar la pérdida ósea y, a la larga, al desarrollo de osteoporosis (1).