No se han registrado efectos nocivos del licopeno (12).
Hay estudios que muestran que una ingesta diaria de hasta 75 mg de licopeno es segura (13).
Puesto que no se ha comprobado la seguridad del licopeno durante el embarazo y la lactancia, las embarazadas y lactantes deberían obtener el licopeno de los alimentos más que de suplementos. No hay ningún motivo para limitar el consumo de fruta y verdura ricas en carotenoides durante el embarazo (14).
Actualmente no se ha establecido un nivel máximo de ingesta tolerable (UL) para el licopeno.
Una ingesta elevada de alimentos ricos en licopeno o suplementos podría causar un tinte naranja fuerte en la piel conocido como licopenodermia. Debido a que el licopeno tiene un color más intenso que los carotenos, la licopenodermia se podría dar con dosis más bajas que la carotenodermina (15).
No existen interacciones conocidas con el licopeno.