OPINIÓN EXPERTA
Métodos defectuosos en los estudios sobre vitaminas
1 febrero 2013
28 enero 2010
Unos niveles más altos del ácido graso omega-3 docosahexaenoico podrían reducir el riesgo de padecer problemas dentales, según sugiere un nuevo estudio.
En este estudio se calculó el consumo alimentario de ácidos grasos esenciales, el ácido docosahexaenoico (DHA) y el ácido eicosapentaenoico (EPA), en 55 personas con una edad media de 74 años (1). A lo largo de cinco años se documentó el promedio de casos de problemas dentales. La ingesta media de EPA y DHA fue de 947,1 y 635,2 miligramos, respectivamente, y los participantes experimentaron una media de 7,8 casos de enfermedad periodontal. Los resultados revelaron que las personas con una ingesta baja de DHA presentan un índice de incidencia aproximadamente 1,5 veces mayor de enfermedad periodontal.
Además de constituir un riesgo importante para la pérdida de dientes, la enfermedad periodontal también se considera un factor de riesgo en enfermedades crónicas como la enfermedad cardiovascular. Dado que esta afección puede contribuir a aumentar la carga inflamatoria general de un individuo, se estudia que pueda elevar el riesgo de enfermedad cardiovascular.
Los beneficios de los ácidos grasos omega-3 están ampliamente documentados desde principios de los años 1970. Hasta ahora, los ácidos grasos poliinsaturados (PUFAs) se han asociado a una mejora de los niveles de lípidos, una menor propensión a padecer trombosis, una mejoría de presión arterial y el ritmo cardiaco y una mejor función cardiovascular. Pese a todo, no existe mucha documentación sobre las asociaciones con la salud dental.
Refiriéndose al posible mecanismo, los investigadores han señalado que puede estar probablemente relacionado con los efectos antiinflamatorios de los ácidos grasos omega-3.
1 febrero 2013
7 marzo 2014
Un nuevo estudio estadounidense afirma que los grupos de población minoritarios con bajos ingresos, sobrepeso u obesidad podrían tener un riesgo significativamente mayor de insuficiencia de calcio y vitamina D, pese al importante papel que desempeñan estos nutrientes en la salud ósea durante todas las etapas del ciclo vital.
22 febrero 2016
El 50% de las personas mayores de 70 años en Estados Unidos no alcanzó el requerimiento medio estimado (RME) de vitamina D, E y K, y entre el 35 y el 40% no alcanzó el RME de vitaminas C y A. En el caso de las vitaminas del grupo B, el porcentaje disminuyó a entre un 1 y un 30%.