Según un nuevo estudio realizado en Italia, las recomendaciones de suplementación prenatal son demasiado bajas para garantizar una suficiencia de vitamina D en los recién nacidos, en particular para las madres con pieles más oscuras.
En el estudio observacional, se midieron las concentraciones de vitamina D en la sangre del cordón y en suero de 62 bebés nacidos a término (1). De estos bebés, 32 nacieron de madres italianas de piel clara, 30 nacieron de madres no caucásicas, 10 de las cuales tenían la piel marrón clara y 20 de las cuales tenían la piel marrón/negra de tono intermedio. Las treinta de origen no caucásico procedían de África, Asia, África del Norte y Latinoamérica. Todas las madres de los bebés tomaban de forma diaria vitaminas prenatales que contenían 400 UI de vitamina D. Los resultados del estudio mostraron que la suplementación prenatal era inadecuada, puesto que los bebés nacidos de madres con la piel pálida tenían un nivel medio de vitamina D de 17,1 ng/ml, los bebés nacidos de madres con la piel marrón clara tenían un nivel de vitamina D medio de 8,3 ng/ml y los bebés nacidos de madres con la piel marrón de tono intermedio tenían un nivel medio de vitamina D de 15,3 ng/ml.
Los investigadores concluyeron que el consumo prenatal de 400 UI de vitamina D al día (que aún son recom-endados por algunas organizaciones) resultó inadecuado para todos estos bebés de diferentes etnias y color de piel. Los datos sugieren que son necesarias dosis por encima de las 1.000 UI de vitamina D al día para alcanzar niveles de vitamina D suficientes en mujeres embarazadas (2). Añadieron que identificar y tratar la deficiencia de vitamina D al nacer es esencial para prevenir enfermedades más adelante.