El metabolismo de los hidratos de carbono y las grasas para producir energía requiere numerosas reacciones químicas dependientes del magnesio. La proteína que produce moléculas (adenosín ‘trifosfato’, ATP) en las mitocondrias y se encarga de suministrar energía a casi todos los procesos metabólicos también necesita magnesio (3).
El magnesio es necesario para diversos pasos durante la producción de ácido nucleico (ADN y ARN) y de proteínas.
Varias enzimas que intervienen en la síntesis de los hidratos de carbono y los lípidos precisan de magnesio para realizar su actividad. El glutatión es un importante antioxidante que requiere magnesio para su síntesis (3).
El magnesio tiene una función estructural en los huesos, las membranas celulares y los cromosomas (3).
El magnesio es necesario para el transporte de iones como potasio y calcio a través de las membranas de las células, afectando a la transmisión de los impulsos nerviosos, la contracción muscular la contracción muscular y el ritmo cardiaco (3).
La señalización celular requiere el complejo de magnesio y ATP para la activación de las proteínas y la formación de molécula (‘adenosín monofosfato cíclico’, AMPc), que es un mensajero celular que interviene en muchos procesos (3).
Los niveles de calcio y magnesio en el fluido que rodea a las células afectan al movimiento (‘migración’) de varios tipos de células diferentes. Estos efectos sobre la migración celular pueden ser importantes para la cicatrización de heridas (3).
La ingesta de altas dosis de zinc en forma de suplementos aparentemente reduce la cantidad de magnesio admitida en el cuerpo (‘absorción’) (2).
Se ha descubierto que un aumento grande del aporte de fibra dietética reduce el aprovechamiento del magnesio (3, 4).
La proteína alimenticia puede afectar a la absorción del magnesio (5).
La forma activa de la vitamina D (calcitriol) puede aumentar ligeramente la absorción de magnesio en el tracto digestivo (3, 4). Sin embargo, la absorción de magnesio no parece depender del calcitriol, como lo hace la absorción de calcio y fosfato.
La Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA), que presta asesoramiento científico a los responsables políticos, ha confirmado que se han demostrado unos claros beneficios para la salud de la ingesta de magnesio en la dieta, ya que contribuye a lo siguiente:
