Según un nuevo estudio realizado en Reino Unido, se ha observado un efecto protector del ácido fólico contra la depresión después del embarazo, en especial en mujeres con genotipo MTHFR C677T TT.
Los autores analizaron los datos de más de 13.000 mujeres tomados durante y después de su embarazo. Las mujeres participaron en el Avon Longitudinal Study of Parents and Children (ALSPAC), un estudio prospectivo poblacional que investiga los factores que afectan a la salud de los niños y sus padres (1). Los investigadores examinaron la relación entre la suplementación con ácido fólico durante y después del embarazo y el genotipo MTHFR C677T. Además, calcularon los cambios en la puntuación de la depresión según la Edinburgh Postnatal Depression Scale (EPDS) a las 18 y a las 32 semanas de embarazo, así como a las 8 semanas, a los 8 meses y a los 21 meses después del parto, y en el período comprendido entre los 8 y los 21 meses después del parto. El uso de suplementos de ácido fólico se calculó mediante un cuestionario.
El estudio se basó en ensayos previos que habían mostrado que los niveles bajos de folato estaban relacionados con la depresión en la población en general. La participación del folato en la metilación del ADN, un proceso esencial para la regulación genética, es uno de los mecanismos biológicos que podrían responder a la pregunta: ¿Cómo afecta el folato a las vías del sistema nervioso central que regulan el ánimo? La enzima metilentetrahidrofolato reductasa (MTHFR) metaboliza el folato y participa en la síntesis de la metionina de la homocisteína. La actividad de la MTHFR y los niveles de homocisteína en circulación están relacionados con el gen MTHFR, en el que se da un polimorfismo C677T. Muchas mujeres toman suplementos de ácido fólico antes de la concepción y en los primeros 3 meses de embarazo o incluso durante éste para reducir el riesgo de que haya defectos del tubo neural de los bebés.
Los autores no hallaron pruebas vinculantes de una relación entre la suplementación con ácido fólico, que podría incrementar los niveles de folato en circulación y descender significativamente los niveles de homocisteína, y los cambios en la puntuación de la depresión durante el embarazo o hasta 8 meses después del parto. Al margen de esto, “sí se encontraron pruebas que sugieren que la suplementación con ácido fólico durante el embarazo podría proteger del aumento de los síntomas de la depresión entre 8 y 21 meses después del embarazo.” Este efecto es más pronunciado en mujeres con genotipo MTHFR C667T TT, en las cuales se ha observado un mayor efecto de la suplementación con ácido fólico en el folato en circulación y en los niveles de homocisteína. Según los resultados de este estudio, los suplementos con ácido fólico tienen un mayor impacto en la puntuación EPDS “21 meses después del parto en mujeres con genotipo TT.”