Corporate Website

Compartir

Etiquetas

  • NOTICIAS
  • 2009

El calcio puede ayudar a reducir el riesgo de cáncer

Publicado

20 enero 2009

Las mujeres que consumen mucho calcio en forma de alimentos y de suplementos presentan un menor riesgo de cáncer en general, y tanto los hombres y las mujeres que consumen mucho calcio tienen menos riesgo de cáncer colorrectal y otros cánceres del sistema digestivo.

Un gran estudio prospectivo hizo un seguimiento de 293.907 hombres y 198.903 mujeres de edades comprendidas entre los 50 y los 71 años. Los participantes tuvieron que completar un cuestionario de frecuencia de consumo de alimentos al inscribirse en el estudio, en el que se les preguntaba cuánto y con qué frecuencia consumían a diario, así como otros alimentos convencionales, y si tomaban suplementos. Después de siete años de seguimiento, el estudio reveló que las mujeres que consumían hasta 1.300 mg/día de calcio a partir de una combinación de alimentos convencionales y suplementos tenían menor riesgo de cáncer en general.

El estudio también mostró que las mujeres que más calcio consumían (1881 mg/día a partir de una combinación de alimentos convencionales y suplementos) presentaban un 23% menos de riesgo de tipos de cáncer digestivos, especialmente cáncer colorrectal, que aquéllas que consumían menos (494 mg/día). Los hombres que más calcio tomaban de los alimentos convencionales y de los suplementos (unos 1530 mg/día) también tenían un 16% menos de riesgo de tipos de cáncer digestivos que los que menos calcio consumían.

Estudios observacionales anteriores han demostrado una relación inconsistente entre la ingesta de calcio y el cáncer. Los investigadores observaron que el calcio puede aportar beneficios que van más allá de la salud ósea, pero aún se necesita más investigación que ayude a explicar las diferencias observadas en cuanto al sexo y a evaluar mejor los efectos en otros tipos de cáncer no digestivos.

REFERENCIAS

  1. Park Y. et al. Dairy Food, Calcium and Risk of Cancer in the NIH-AARP Diet and Health Study. Archives of Internal Medicine, 2009; 169 (4):391–401.

This site uses cookies to store information on your computer.

Más información