Un nuevo estudio realizado en EE. UU. muestra que los suplementos dietéticos aportan micronutrientes a las dietas de los niños de más de 8 años que, sin la suplementación, tendrían una cantidad inadecuada de vitaminas A, C y E. Sin embargo, el uso de suplementos contribuye al riesgo de hacer un consumo por encima de las dosis recomendadas de determinados nutrientes.
Para analizar si los niños (de 2 a 18 años) usan suplementos para subsanar carencias de dietas nutricional-mente inadecuadas o si los suplementos son un añadido para las dietas que ya contienen los micronutrientes adecuados procedentes de los alimentos, el estudio analizó los datos del National Health and Nutrition Exami-nation Survey 2003-2006, una encuesta transversal representativa a escala nacional (1). La dieta de 7.250 niños se evaluó usando dos recordatorios de 24 horas y el uso de suplementos dietéticos se calculó a través de un cuestionario de 30 días. Los resultados del estudio mostraron que los que usaban complementos tenían un mayor consumo de micronutrientes que los que no usaban. En todos los grupos de edad, el consumo de suplementos mejoró el consumo de calcio y de vitaminas A, C, D y E. El consumo de calcio y de vitamina D era bajo en todos los niños, independientemente del uso de suplementos, y más de un tercio de los niños tenía un consumo insuficiente de dichos nutrientes. El consumo de folato, de vitaminas B6 y B12 y de selenio a través de los alimentos era suficiente entre los niños de 2 a 8 años mientras que la mayoría de los que no tomaban suplementos no conseguían tener niveles adecuados de calcio y de vitaminas D y E. Entre los niños de 9 a 18 años se observó una mayor prevalencia de consumo inadecuado de magnesio, fósforo y de vitaminas A, C y E. Los suplementos proporcionaron más micronutrientes a las dietas que, sin la suplementación, serían inadecuadas. Al mismo tiempo, el uso de micronutrientes contribuyó al posible exceso de consumo de nutrientes como el zinc, el folato, el hierro y la vitamina A.
Los investigadores comentaron que para algunos niños que habían presentado deficiencia de algunas vitaminas y minerales, los suplementos eran una ayuda. En especial para los niños de más edad, tomar suplementos proporciona nutrientes cuyo consumo sería insuficiente si se obtuviera de los alimentos solo. Al mismo tiempo, los suplementos contribuyen al riesgo de sobrecarga de micronutrientes. Los productores de vitaminas para niños deberían considerar la opción de reformular sus productos para hacer encajar mejor las necesidades de los niños y las dietas actuales.