NOTICIAS
El folato: ¿el eslabón perdido de la obesidad?
31 octubre 2016
El índice de obesidad se ha multiplicado prácticamente por dos desde principios de los 80 y se ha especulado mucho sobre las posibles razones de este fuerte incremento
21 mayo 2014
Según un nuevo estudio australiano, unas concentraciones de carotenoides como el betacaroteno en sangre elevadas podrían prevenir fracturas a largo plazo.
El estudio clínico observó los incidentes de fractura producidos entre 998 participantes adultos que recibieron vitamina A (7,5 mg equivalentes de retinol) y/o betacaroteno (30 mg) a diario durante 8 años (1). Los resul- tados del estudio mostraron que los participantes con concentraciones crecientes de carotenoides totales en sangre tenían un riesgo menor de cualquier fractura. No se observó una asociación entre las concentraciones de retinol plasmático y el riesgo de fractura osteoporótica o de cualquier otro tipo.
Los investigadores comentaron que los hallazgos distan de los resultados de algunos estudios observacio- nales anteriores que asociaban un mayor riesgo de fractura con un aumento en los niveles de retinol sérico (2, 3). El nuevo estudio incluyó un número mayor de participantes con concentraciones de retino y betacaro- teno plasmáticas mas altas que estudios observacionales previos y pudo observar un rango más amplio de concentraciones. Por otro lado, los nuevos resultados coinciden con observaciones anteriores de que la suplementación prolongada con retinol (hasta 17 años) no está asociada con el riesgo de fractura, mientras que la suplementación prolongada de betacaroteno podría reducir el riesgo (4).
31 octubre 2016
El índice de obesidad se ha multiplicado prácticamente por dos desde principios de los 80 y se ha especulado mucho sobre las posibles razones de este fuerte incremento
17 junio 2011
Según un nuevo estudio, una cuarta parte de los canadienses no cumple las recomendaciones para la ingesta de vitamina D pese a los alimentos enriquecidos.
1 noviembre 2014
El ojo contiene numerosos nutrientes y otros componentes de la dieta que se refuerzan y complementan entre sí. Algunos nutrientes son necesarios para la estructura física básica del ojo, otros para la fisiología de la visión, y otros para la protección.