Betacaroteno – una fuente segura y necesaria de vitamina A
El betacaroteno ocupa una posición importante como precursor (‘provitamina’) de la vitamina A.
La vitamina A es importante para la vista, y su deficiencia deriva en ceguera nocturna. Por otra parte, la vitamina A actúa como factor de crecimiento e interviene en la reproducción, el sistema inmunitario y la formación de la piel.
Estudios alemanes sobre el consumo de alimentos a nivel nacional han revelado que una gran parte de la población consume muy poca vitamina A pura en la dieta (1–3). Los escolares, las personas mayores y las mujeres embarazadas son los grupos más afectados. El hígado y los pescados grasos constituyen las fuentes principales de vitamina A, aunque no es posible predecir en qué medida podrá aumentarse el consumo de estos alimentos a largo plazo. Para muchos, el betacaroteno representa la fuente más importante de vitamina A. Los alemanes, por ejemplo, obtienen casi el 50% de su aporte de vitamina A a través de esta provitamina (4).
Los expertos en nutrición recomiendan una ingesta diaria de entre 0,7 y 1,0 mg de vitamina A (retinol) para adultos sanos. Para alcanzar este nivel, se requieren entre 2 y 4 mg diarios de betacaroteno. La ingesta mdia de una persona está claramente por debajo de estas recomendaciones, ya que aún se consume muy poco betacaroteno a partir de las frutas y las verduras (5). Puesto que los alimentos ricos en betacaroteno no son suficientes por sí mismos para garantizar el aporte diario deseable de vitamina A, los zumos como las bebida ‘ACE’, que están enriquecidas con este carotenoide, o los suplementos en dosis apropiadas proporcionan un buen complemento a este aporte (6).
En lo que se refiere a la seguridad, el betacaroteno en los alimentos, los alimentos enriquecidos y los suplementos dietéticos (p. ej., comprimidos o píldoras vitamínicas) se consideran completamente inofensivos para los no fumadores (7). A los fumadores se les recomienda limitar su ingesta diaria de betacaroteno a 20 mg. Los profesionales de la salud nutricional consideran que la carencia de betacaroteno o vitamina A representa un mayor riesgo para la salud general de la población que un aporte excesivo.