El uso habitual de suplementos de vitamina E podría reducir el riesgo de enfermedades pulmonares crónicas en mujeres, según un nuevo análisis estadounidense.
El análisis se basó en un amplio ensayo aleatorizado controlado con 38.597 mujeres sanas profesionales de la salud, mayores de 45 años, a las que se administró vitamina E (600 UI en días alternos) o bien aspirina (100 mg en días alternos) durante10 años. El objetivo era evaluar el efecto de la vitamina E sobre la enfermedad pulmonar crónica con diagnóstico médico, basándose en los datos facilitados por las propias pacientes (1). El estudio demostró que los suplementos de vitamina E reducen un 10% el riesgo de padecer esta enfermedad. Esta reducción no se vio modificada por factores como el tabaquismo, la edad, la asignación aleatoria de aspirina, el uso de multivitamínicos o la ingesta dietética de vitamina E.
Se cree que la alteración del equilibrio oxidante/ antioxidante en los tejidos pulmonares contribuye a aumentar el riesgo de enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC). Los estudios observacionales han venido demostrando que un aumento de la ingesta de nutrientes con propiedades antioxidantes está asociada a un menor riesgo de desarrollar EPOC (2). Los estudios comparando a pacientes con EPOC con individuos sanos han medido concentraciones más bajas de vitamina E (alfa-tocoferol) en el plasma y en el músculo esquelético periférico en pacientes, y un menor riesgo de muerte por enfermedades respiratorias con mayores concentraciones séricas de alfa-tocoferol. No obstante, la cuestión de si la alimentación contribuye a la aparición de EPOC no está tan clara (3). Ensayos aleatorizados sobre cambios en la dieta o suplementos de vitamina E en poblaciones de pacientes han ofrecido resultados diversos.
La EPOC se caracteriza por una limitación progresiva e irreversible del flujo de aire y conlleva una importante carga para el sistema sanitario público, con una prevalencia de alrededor del 10% en todo el mundo. Dadas las escasas estrategias de prevención, los investigadores han señalado la importancia para la salud pública de realizar más estudios sobre la vitamina E en relación con la EPOC.