«La vitamina E es un importante antioxidante que previene las reacciones de los radicales libres y la peroxidación lipídica. Esta función preventiva del estrés oxidativo puede resultar especialmente pertinente en el desarrollo de varios cánceres, incluido el de próstata. Sin embargo, persiste la polémica sobre la asociación de la vitamina E con el riesgo de cáncer prostático, ya que se hallaron efectos beneficiosos de los complementos de vitamina E en un ensayo aleatorio con fumadores (1), pero no en otros dos ensayos que no incorporaron fumadores (2,3). No hay resultados concluyentes sobre si la asociación beneficiosa se da únicamente en fumadores o si intervienen otros factores, como los polimorfismos genéticos relacionados con el estrés oxidativo. Un hipotético mecanismo de estrés oxidativo en relación con el cáncer de próstata implicaría la participación de cuatro importantes enzimas: MnSOD8, GPX1, CAT y MPO.
El principal objetivo de este estudio (4) era examinar la asociación del alfa y el gamma tocoferol séricos con el riesgo de cáncer de próstata en el ensayo aleatorizado controlado CARET (5) utilizando un diseño de estudio de casos y controles anidados. Se probaron concentraciones de alfa y gamma tocoferol en 684 grandes fumadores y trabajadores expuestos a amianto con cáncer de próstata incidente y 1.441 controles. Después investigamos si las variantes genéticas (polimorfismos) de las cuatro enzimas reguladoras del estrés oxidativo seleccionadas (MnSOD, GPX1, CAT y MPO) modifican estas asociaciones.
Los resultados del estudio demostraron que:
- En fumadores activos, la elevada concentración de alfa y gamma tocoferol iba asociada a un menor riesgo de cáncer de próstata agresivo.
- Los fumadores activos con la concentración sérica más elevada de alfa tocoferol mostraron una reducción del riesgo de cáncer de próstata del 38% frente a los que tenían la concentración más baja.
- Los participantes con la concentración sérica más elevada de gamma tocoferol mostraron una reducción no significativa del 31% del riesgo de cáncer de próstata agresivo.
- Las variantes genéticas de la enzima MPO reguladora del estrés oxidativo iban asociadas a un riesgo casi doble de cáncer prostático agresivo en fumadores activos con bajos niveles séricos de alfa tocoferol.
En conclusión, nuestros datos sugieren que, en fumadores activos, la alta concentración de alfa y gamma tocoferol está asociada a un menor riesgo de cáncer de próstata agresivo. La elevada concentración de alfa tocoferol en suero puede ser especialmente importante para reducir el riesgo de cáncer de próstata en varones con una variante genética de la MPO. Considerando que se detectaron variantes de la MPO en el 40% de la población de nuestro estudio, nuestras observaciones tienen importancia para la salud pública, ya que estos genotipos son frecuentes en la población general».
Washington, julio de 2011
Apéndice: Los estudios que en el pasado no lograron encontrar un beneficio protector de la suplementación con vitamina E para el riesgo de cáncer de próstata no tuvieron en cuenta el efecto potencial de los polimorfismos genéticos en el metabolismo de la vitamina E. Los polimorfismos genéticos parecen tener relevancia en la eficacia de los micronutrientes: la vitamina E, por ejemplo, proporciona protección cardiovascular a personas con diabetes y determinados genotipos de haptoglobina (HP 2-2) (6). La revisión de dos ensayos (HOPE e ICARE) concluyó que la suplementación con vitamina E (400 IU diarios) disminuye significativamente el riesgo de muerte cardiovascular e infarto de miocardio en personas con diabetes mellitus y genotipo HP 2-2 (7). Dado que los norteamericanos de 2 o más años de edad sólo consumen
7,7 mg de vitamina E diarios (8) –aproximadamente la mitad de los 15 mg/d recomendados– los complementos en la dieta podrían resultar beneficiosos.